Si preguntamos por el número de sesiones de fisioterapia, por ejemplo, a una compañía de seguros de salud (ya sea pública o privada) parece que la respuesta será un número múltiplo de 5 calculado más o menos por lo que alguien intuye que puede tardar en mejorar la lesión.
Recetas de fisioterapia de 5, 10, 20 sesiones... Con posterior revisión para valorar los son comunes, pero, como en muchas cosas en la vida, cantidad no tiene por qué ir asociado a calidad, pues depende mucho del tiempo de tratamiento y del tratamiento en concreto realizado, además de ser fundamental las características del fisioterapeuta.
Recetando sesiones de fisioterapia como rosquillas, para que luego estas sean de poco tiempo y sin dar la oportunidad a tratamientos individualizados puede ser una buena forma de recibir decenas de sesiones sin notar cambios significativos. Sin duda este sistema no es el mejor para calcular cuántas sesiones serán necesarias para recuperarse de una lesión.
Tiempos de curación
Por muy bueno que sea el fisioterapeuta, hay lesiones que necesitan un tiempo mínimo de tratamiento y recuperación. Por ejemplo, una fractura de un hueso necesita que esperemos a que se produzca la reparación y consolidación del hueso, algo que se toma su tiempo (incluso varios meses en algunos casos).
Otras lesiones, como roturas de ligamentos, meniscos... Necesita un tiempo mínimo (meses) para poder reanudar el esfuerzo, aunque durante todo el tiempo se puede trabajar con fisioterapia para ir minimizando las secuelas y acelerando en lo posible la recuperación.
En estos casos una buena valoración fisioterápica es muy importante para ir fijando los objetivos de cada etapa de recuperación, e ir trabajando para optimizar los tiempos sin arriesgar más de lo necesario.
Un buen fisioterapeuta invertirá bastante tiempo algunas sesiones para evaluar y reevaluar. Pero esto no es tiempo perdido de tratamiento, sino que es lo que dirige y da sentido al tratamiento.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario